miércoles, 20 de julio de 2011

El rollo de la guerra civil

En mi niñez y primera juventud nos tenían fritos con lo de la guerra civil, entonces llamada cruzada de liberación. Costó mucho a quienes lo conseguimos darnos cuenta que los malos no eran tan malos ni los buenos tan buenos. Incluso con el tiempo entendimos que los entonces oficialmente buenos habían provocado en su ineptitud algo espantoso pretendiendo evitar un caos que, por otra parte, evidentemente existía. También supimos enmarcar lo que pasó en la política europea (continental) de la época en la que las ideas totalitarias fascistas, comunistas y anarquistas eran dominantes.

Así que la mayoría de nosotros fuimos contemplando con complacencia como las consecuencias de aquel horror se iban diluyendo en la historia de la transición política de forma lenta, quizás más lenta de lo deseable, pero inexorable.

Pero para lo que no estábamos preparados es para este resurgir del civilguerrismo, ahora como polémica inacabable. Con uno de los pocos sospechosos de ejecuciones en masa aún supervivientes (sino el único) acusando todavía al otro bando como único culpable, para más esperpento. Mientras otros afirman el carácter liberal del General Franco. Son versiones descaradamente partidistas que no cuadran ni con lo que dicen los historiadores serios ni, lo más importante, con lo que nos contaron nuestros padres.

Yo que tuve la suerte de tener a uno de ellos de cada tendencia, aprendí que había cosas en las que era fácil que coincidiesen en sus recuerdos. En el terror de saber que alguien te podía sacar a medianoche de casa o pararte por la calle y acabar fusilado en una tapia, en el hambre que se pasó, en la locura ideológica de muchos de los dirigentes de ambos bandos y como consiguieron contagiar su fanatismo a mucha gente, en como otros simplemente se provecharon de la situación para dar cauce a sus odios personales y fobias, en que fue un experimento de lo que sería después de segunda guerra mundial para el que los españoles sirvieron de conejillos de indias.

Sé que es inevitable, pero es el ruego de alguien que curiosamente no hubiera venido al mundo catorce años después sin la matanza de la que presuntamente fue responsable el personaje del que hablaba antes: olvídense del asunto si la única forma que tienen de tratarlo es como lo están haciendo ahora. Echar en cara algo que ocurrió hace 75 años a la gente de derechas o de izquierdas de ahora mismo es simplemente de psiquiatra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario